5.134 - TE ESPERARÉ...
Te esperaré
sentado en los jardines
con mis poemas.
Serán dos besos,
calcados de mis labios
en un cuaderno.
Los leerán
mis ojos a los tuyos
en un susurro.
Te esperaré
callado y en silencio
hasta que llegues.
Y volverá
tu risa cristalina
a mis oídos.
También tu voz,
alegre y seductora
con su ternura.
Te esperaré,
te digo y te repito,
y no lo dudes.
Quiero tus labios
uniéndose a los míos
en la distancia.
Serán los versos,
latentes de mi vida,
en un poema.
Rafael Sánchez Ortega ©
30/06/22
5.133 - DAME TUS ALAS...
Dame tus alas
y llévame contigo
en largo vuelo.
Cierro los ojos
Me duermen tus latidos
mientras volamos.
Iremos lejos,
en viaje sin destino
por todo el mundo.
Cuando te canses
haremos un inciso
cerca del bosque.
Allí, en la fuente,
daremos un traguito
del agua fresca.
Y volveremos,
de nuevo al infinito,
sobre tus alas.
Alas de plata
repletas de suspiros
y de esmeraldas.
Son nuestros sueños,
aquellos que, dos niños,
nos entregaron.
Y llegaremos
un día, hasta el Olimpo,
para soñar.
Rafael Sánchez Ortega ©
29/06/22
5.132 - TE VUELVO A VER...
Te vuelvo a ver,
querida mariposa,
y me emociono.
Sentía tanto
tu ausencia y tu silencio
que estaba triste.
Ahora estás cerca
y vuelves, nuevamente,
con tu sonrisa.
Es lo que quiero,
saber que estás alegre,
vivir tu vuelo.
Y contemplar
los giros de tus alas
y sus colores.
No me abandones,
preciso de tu encanto
y tus caricias.
Estabas lejos,
ausente de mi vida,
y te extrañaba.
Fuiste la estrella
que un día guió mis pasos
entre las brumas.
Y conseguimos
soñar como dos niños
con los poemas.
En esos sueños
volamos a la infancia,
mi mariposa.
Por eso quiero
volver hasta esos versos
y compartirlos.
Rafael Sánchez Ortega ©
28/06/22
5.131 - SI ME QUISIERAS...
Si me quisieras
darías lo que tienes
por conseguirme.
Eso te dijo
retándote, una tarde,
en tu inconsciencia.
Y abandonaste
tu mundo y tu fortuna,
y la seguiste.
Tenías poco,
quizás lo suficiente
para vivir.
Pero la amabas
y viste en sus palabras
una promesa.
(¡Qué ingenuidad
el alma de aquel niño
que era un poeta!
Sufrió, sin duda,
detrás de los cometas
y la ilusión.)
Hasta que un día,
un vuelo y un suspiro
te sorprendió.
Cayeron velos
y enormes marionetas
que te cegaban
Y entonces vieron,
tus ojos, inocentes,
la mariposa.
No tengas miedo,
te dijo en un susurro,
vamos al cielo.
Rafael Sánchez Ortega ©
27/06/22
5.130 - PODEMOS IRNOS...
Podemos irnos,
volar con nuestros sueños,
si es tu deseo.
Ya que, si quieres,
iremos a la tierra
de los poetas.
En ese sitio,
que llaman el Olimpo,
duermen los dioses.
Y buscaremos
de Aquiles hasta Zeus,
todas sus liras.
Que nos enseñen
sus versos y sus cantos
llenos de magia.
Que nos compartan,
sin miedo, sus secretos
para aprender.
Y si algún día,
volvemos de este sueño
lo escribiremos.
Seremos dioses
y poetas, como ellos,
aunque menores.
Y, por supuesto,
seremos siempre niños,
mi mariposa.
Rafael Sánchez Ortega ©
26/06/22
5.129 - MUEVES LAS ALAS...
Mueves las alas
y yo, mientras, te miro
desde la acera.
Hoy vas preciosa,
con tu vestido blanco,
mi mariposa.
Sueño contigo
y pienso en las mañanas
de primavera.
Tú despertabas
mis ojos soñolientos
con alegría.
Una sonrisa
traías a mis labios
desde tus alas.
Me la prestabas
con gracia y con ternura
por unas horas.
Luego, en la tarde,
volvías a mi lado
a despedirte.
Y te llevabas
la felpa de tus alas
llena de estrellas.
Y con mis sueños
volabas a los cielos
hasta otro día.
Rafael Sánchez Ortega ©
25/06/22
5.128 - EL MARINERO...
El marinero
apura su remada
ante la barra.
Es algo lógico,
el puerto está a su alcance,
ya falta poco.
En él esperan
la casa, su familia
y los amigos.
La poca pesca,
que a pulso ha conseguido,
está en su cesta.
Cestas de mimbre,
con piezas de madera
para llevarlas.
¡Cuántos recuerdos
dejaron esas cestas
desde mi infancia!
...Ya llega al puerto,
sus últimas remadas
son más tranquilas.
Atrás quedaron
un día de faena
y horas de pesca.
Ahora le resta
el cambio, en la taberna,
por vino y perras.
Rafael Sánchez Ortega ©
24/06/22
5.127 - DEJA QUE SIGAN...
Deja que sigan
los pájaros cantando
en el jardín.
Les queda poco,
se fue la primavera
y andan revueltos.
Era su amiga,
la luz de sus miradas
y de sus cantos.
Ahora, el verano
les deja los calores
de los tejados.
En los balcones
y luego, en las ventanas,
ellos descansan.
Son las casonas
del norte, de mi tierra,
que bien conozco.
¡Cuánta alegría
nos dejan los gorriones
con su presencia!
Y los jilgueros,
también las golondrinas
y otros sin nombre.
Deja que canten
y lleguen sus rumores
tan celestiales.
Rafael Sánchez Ortega ©
23/06/22
5.126 - LLEGÓ EL VERANO...
5.125 - ASÍ TE VEO...
Así te veo,
feliz e ilusionada
mirando el cielo.
Buscas la nube,
quizás las mariposas
y golondrinas.
Cierras los ojos,
los abres nuevamente,
llega el verano.
Dices adiós,
se va la primavera
una vez más.
Aquí te quedas,
en medio del verano
que ya comienza.
Será el calor,
del mar y de la playa,
protagonista.
Entre sus brazos
querrás sentir las olas
besar tu cuerpo.
Sabor al yodo,
de algas y salitres
del mar bravío.
Pero el verano
también llega a los montes
y a las aldeas.
Rico folclore
de luz y fantasías
se ven en ellas.
Y tú disfrutas,
del día y del verano
mientras suspiras.
Rafael Sánchez Ortega ©
21/06/22
5.124 - AUNQUE LA MONA...
Aunque la mona
se vista de (se) seda,
mona se queda.
Y es que la seda,
sedosa de la mona
tartamudea.
Vamos al grano,
Tomemos a los versos
con sus "letrinas"
Y digo bien,
no pienses otras cosas
que yo te veo.
Es el espejo
del mono que se mola
y va sin mona.
Mono, monito,
enrolla bien el rabo
pa´ tu monita.
Ella tan cursi
con pinta de repipi
está muy tiesa.
Va sin tacones
y canta en sus "bajinis"
por las aceras.
Monita linda,
de seda, encuadernada,
eres traviesa.
Pero te quiero,
sin seda y sin tacones.
¡Eres mi sueño!
Naces del cuento,
excitas las sonrisas
y apartas sombras.
Por eso digo
que vista o desvestida
serás bien vista.
Rafael Sánchez Ortega ©
10/06/22
5.123 - TE HE VUELTO A VER...
5.122 - EL TIEMPO PASA...
El tiempo pasa
y quedan los recuerdos
en la memoria.
Recuerdos verdes
de largas primaveras
y de ilusiones.
Otros más grises
con días de veranos
algo agridulces.
Recuerdos blancos
con ratos de la infancia
inolvidables.
El tiempo sigue
latiendo en el otoño
en que me encuentro.
Ahora, al presente
le aprecio más que nunca
y le disfruto.
Es cuenta atrás,
de un tiempo regalado
del día a día.
Por eso, al tiempo,
que llega y me recibe,
voy a su encuentro.
Y le comparto,
contigo y con mis versos
para tus labios.
Rafael Sánchez Ortega ©
19/06/22
5.121 - EXISTEN VERSOS...
Existen versos
que esperan la mirada
de tus pupilas.
Existen letras
unidas, en palabras,
para escribirlas.
Existen frases
que buscan un destino
cerca de ti.
Existen besos
que esperan en mis labios
ir a los tuyos.
Existen manos
con dedos muy nerviosos
que te precisan.
Existen dedos
que ofrecen mil caricias
para tu cuerpo.
Existe un cielo
con sueños y promesas
para nosotros.
Existe un mundo
con risas y con llantos
donde vivimos.
Y en el poema
del hombre y de la vida
van nuestros nombres.
Rafael Sánchez Ortega ©
18/06/22
5.120 - AGUANTA UN POCO...
Aguanta un poco,
la barra está cercana,
ya queda menos.
Recias palabras,
cargadas de esperanza
que recordaba.
Atrás quedaron,
veranos bonancibles
y corta infancia.
Hoy te sonríes,
pensando en esos años
tan soñadores.
Buscabas algo
y a alguien, en tu vida,
que te cambiara.
Algo sin nombre,
acaso sin figura,
que ilusionara.
Y lo encontraste
en forma de unos versos,
en el poema.
Allí escuchaste
los gritos y el latido
de tantas almas.
Ellas pedían,
lo mismo que buscabas
en el amor.
"Aguanta un poco",
recuerdas y suspiras,
hoy es octubre.
Rafael Sánchez Ortega ©
17/06/22
5.119 - ALGUNAS VECES...
5.118 - HOY YA NO VUELAN...
Hoy ya no vuelan
mis lindas mariposas
porque se fueron.
Me las llevaron,
de pronto, de mi lado,
en un suspiro.
Yo me quedé
un tanto entristecido
por esta ausencia.
Lo que más siento,
la ausencia de mis versos
en tu regazo.
Porque mis besos,
por otros derroteros
ya te han llegado.
Volved muy pronto,
pequeñas mariposas,
os necesito.
Venid tranquilas,
traedme sus latidos
y su sonrisa.
Porque preciso
soñar entre sus alas
y sus caricias.
Rafael Sánchez Ortega ©
14/06/22
5.117 -DESCANSA Y DUERME...
Descansa y duerme.
Hoy cantan las sirenas
desde la playa.
Tienen de fondo
la música coral
de las resacas.
Y si me apuras
el eco del silencio
que dan las olas.
Descansa y duerme,
pequeña mariposa
entre mis brazos.
Siente la brisa
que mueve tus cabellos
desde mis labios.
Veré la risa
que surge de tu pecho
a tus mejillas.
Descansa y duerme,
tus sueños son mis sueños,
nunca lo dudes.
Y si algún día,
la vida lo permite,
los viviremos.
Seremos libres
sintiendo los latidos
de nuestro amor.
Rafael Sánchez Ortega ©
14/06/22
5.116 - SI YO TUVIERA...
Si yo tuviera
las llaves de los cielos
te las daría.
Para que vieras
los bosques y jardines
de las estrellas.
Así podrías
bailar entre sus luces
parpadeantes.
Si yo tuviera
los pasos más ligeros
te seguiría.
Así vería
las bellas margaritas
que tú recoges.
Y, por supuesto,
también las mariposas
que te saludan.
Si yo pudiera
robarte una sonrisa
sería hermoso.
Y te daría
mis versos y poemas
con una rosa.
De esta manera
seríamos felices
en nuestros sueños.
Rafael Sánchez Ortega ©
13/06/22
5.115 - A VECES PIENSO...
A veces pienso
y sueño, fantasías,
en mi delirio.
Voy en un barco,
en busca de piratas,
y es de papel.
Vivo en un bosque,
con elfos y con hadas,
en su cabaña.
Soy una hormiga
que busca, por los parques,
migas de pan.
Tengo seis años
y salgo para el cole
con mis cuadernos.
Juego en la playa
y elevo mi cometa
hasta los cielos.
Nado en las olas
buscando las sirenas
y caracolas.
Subo a tus brazos,
me duermo en tu regazo,
madre adorada.
"...¡Pero son sueños
febriles de la infancia
en el otoño..."
Rafael Sánchez Ortega ©
12/06/22
5.114 - ÍBAMOS JUNTOS...
Íbamos juntos
y, a veces, de la mano,
por el paseo.
Era algo lindo,
incluso ya de niños
así jugábamos.
Lindas escenas
que guarda la memoria
en sus recuerdos.
Íbamos juntos
me dice la nostalgia
con voz cansada.
Aquellos ratos,
sin duda, inolvidables,
hoy los añoro.
Y es que en los mismos
un día dimos vida
a nuestros sueños.
Y fuimos juntos
en sendas y caminos
por largos años.
Hasta que el tiempo,
notario inexorable,
trajo el otoño.
Y en él estamos,
marchando, de la mano,
rumbo al invierno.
Rafael Sánchez Ortega ©
11/06/22
5.113 - AQUELLA TARDE...
Aquella tarde
el sol se despedía
hasta otro día.
Un cielo rojo,
con tono anaranjado,
decía adiós.
Las nubes blancas,
de forma almidonada
cambiaban trajes.
Algunos hombres
miraban admirados
este espectáculo.
Como los niños,
(embriones de poetas),
también soñaban.
Sueños de flores,
de ángeles y arcángeles
y poesías.
¡Bello conjunto,
de versos y utopías
para soñar!
Y así, nosotros,
con pasos vacilantes,
vimos la tarde.
Y la vivimos
en medio del otoño
y de la mano.
Rafael Sánchez Ortega ©
10/06/22