6.004 - AQUELLOS GIRASOLES...
Aquellos girasoles,
al cielo saludaban,
estaban en la huerta,
del niño y de su casa
Alzaban su figura
al sol que les llamaba,
dejando los colores
de nueva madrugada.
El niño, muy pequeño,
así los contemplaba,
con ojos y pupilas
absortos en su estampa.
Alegre colorido
de brumas y nostalgias,
llenando de pureza
el fondo de las almas.
El sol, con paso lento,
sus pasos estiraba,
llenando de alegría
la tierra y la mañana.
El agua del rocío
también se destilaba
y el campo y la pradera
de nuevo despertaban.
Cantaban los gorriones
igual que las cigarras,
formando unas corales
de seres sin corbata.
Y el niño, todo esto,
pensaba y cavilaba,
volando con sus sueños
a un mundo de esperanzas.
¡Qué vana es la utopía
del niño en esta fábula,
los sueños son los sueños,
y, a veces, crean farsas.
Rafael Sánchez Ortega ©
29/10/24
6.003 - SE VA APAGANDO LA VOZ...
Se va apagando la voz
que nos dejan las resacas
y se estira su figura,
soñolienta, por las playas.
Hay un silencio profundo
de los mares y las aguas,
y ya descansa el salitre
con el yodo y con las algas.
Es una noche de otoño
soñolienta y solitaria
en que el poeta camina
buscando paz en su alma.
Y la encuentra, no lo dudes,
en los versos que le manda,
una luna, que en el cielo,
aparece y se destaca.
Es la reina de los cielos,
con estrellas que la guardan,
y cometas que recogen
sus sonrisas y sus lágrimas.
Y aquí abajo, yo me encuentro,
prisionero y sin palabras,
de este instante tan precioso
y los besos que me manda.
Y es que la luna es ternura
y caricia con su calma,
que serena las pasiones
y transforma las miradas.
Las pupilas ya se animan
y los labios hasta cantan,
la canción de los marinos
cuando surcan la bocana.
¡Cuántas letras y leyendas,
esas voces, hoy cansadas,
nos dejaron en las noches
junto al fuego de las casas!
Me estremezco al recordarlo
y hasta vuelve aquella infancia,
en que el niño y el poeta
se fundían en su magia.
"...Se va apagando la voz
y la noche ya se pasa,
con las sombras y las nubes
anunciando la borrasca..."
Rafael Sánchez Ortega ©
28/10/24
6.002 - SE PASA EL OTOÑO...
6.001 - HOY HACE FRÍO...
Hoy hace frío
y tiemblan los gorriones
en el jardín.
Mueven las alas
de forma caprichosa,
buscan al sol.
Pero las nubes
que abundan en el cielo
hoy se lo impiden.
Tras los cristales,
y dentro de mi casa,
yo los observo.
Es el otoño,
me digo en un aparte,
y hasta sonrío.
Tomo el café
que tengo entre las manos,
muy lentamente.
Comienza el día,
hay nubes en el alma
y en la mirada.
"Quisiera verte",
te digo sin palabras,
en la distancia.
Pero estás lejos
y verte es imposible
hasta otro rato.
Suspira el labio,
susurran los latidos
y grita el alma,
desde el silencio.
Rafael Sánchez Ortega ©
26/10/24
6.000 - YA SON SEIS MIL...
(Con este poema llego a la cifra de seis mil, los que, a lo largo del tiempo, (desde hace catorce años), he ido depositado en este Blog. En sus versos se mezclan realidad y fantasía, en ese mundo de sueños y utopías por el que caminamos los poetas. Doy gracias a Dios por haberme permitido llegar a esta cifra y a vosotros, amigos y lectores, que alguna vez os habéis asomado a esta ventana).
Ya son seis mil
los sueños y poemas
que aquí descansan.
Este es su sitio,
la casa que encontraron
y donde habitan.
Catorce años
separan al primero
de éste de ahora.
Los hay alegres
y algunos con tristezas,
pero no importa.
Son las migajas,
suspiros de mi alma
con muchos sueños.
Es indudable
que vida y fantasía
están mezcladas.
Pero yo mismo
tendría un gran problema
de separarlos.
La vida es verso
que hacemos cada día
con nuestros actos.
Y con los sueños,
formamos y adornamos
estos poemas.
Son los susurros
del alma de los hombres
en esta vida.
Y damos gracias
al cielo, generoso,
por nuevos días.
En ellos vemos
la vida y el regalo
que representan.
Por eso gracias,
al cielo y a la vida
en este día.
Rafael Sánchez Ortega ©
24/10/24
5.999 - SE DESPIERTAN LOS CIELOS...
Se despiertan los cielos
y amanecen los días,
unas nubes saludan
y nos dejan sonrisas.
Hay pereza en los campos
y rocío que brilla,
con blancura de nieve
y pureza infinita.
Unos pájaros cantan
ofreciendo sus rimas
a través de los trinos
y esa charla continua.
Ya los hombres asoman
por la larga avenida,
con sus hombros cargados
y buscando la vida.
Yo te plasmo en mis versos,
mariposa querida,
mientras cierro los ojos
y persigo una ardilla.
Un borrón taciturno
rompe el verso y la rima,
y alborota sin miedo
la inocente pupila.
Amanece este jueves
y suspira la lira,
del poeta que sueña
con la rosa querida.
Rafael Sánchez Ortega ©
23/10/24
5.998 - CONN LA LLUVIA...
Con la lluvia, nuestros pasos,
recorrieron los caminos,
y cruzamos por aldeas
y riberas de los ríos.
Nos llevaron a montañas
solitarias, con sus riscos,
orgullosos, hacia un cielo,
elevado al infinito.
Y cruzamos por parajes
y refugios variopintos,
con la piedra en sus fachadas
trabajadas con ahínco.
Eran ratos de otros tiempos,
quizás unos del estío,
con algunas primaveras
que arrancaban mil suspiros.
Soportamos aguaceros,
temporales y hasta frío,
para hacer de la montaña
el lugar bien elegido.
Y es verdad que, en sus laderas,
olvidamos y perdimos,
el pudor y la inocencia
para hablar nuestros sentidos.
Y lo hicieron sin palabras,
con galope de latidos,
desbocados y confusos
en el alma de dos niños.
y abrazados, susurramos
el amor tan contenido,
con los labios que buscaban
a ese labio tan querido.
¡Qué importaba que la lluvía
nos mojara los vestidos,
y la ropa chorreara
por el cuerpo a los caminos...!
El amor nos rodeaba
y llegaba confundido,
con la lluvia y con los años
en un tiempo y un destino.
Rafael Sánchez Ortega ©
22/10/24
5.997 - AVANZA LA VIDA...
Avanza la vida
y vuelan los años,
que inundan de absurdos
los tiempos pasados.
Hoy cambian las modas
se ven nuevos casos
y gentes y seres
despiertan del barro.
La vida prosigue
con series y actos,
guiones genuinos,
papeles cambiados.
Existe el absurdo
y abunda lo falso,
se miente y se jura,
promesas en vano.
Antaño existían
palabras y abrazos
con ojos sencillos
sellando sus manos.
Promesas que hacían
las almas y hermanos
de amigos sin sangre
y puede que extraños.
El tiempo que añoro
fue un tiempo sagrado,
que ahora los hombres
reniegan del saldo.
"...Avanza la vida
con nubes y fango,
y escucho la música
de un vals y de un tango..."
Rafael Sánchez Ortega ©
21/10/24
5.996 - TE NECESITO...
Te necesito
y ansío la ternura
que tú me das.
Es esa mano
que roza mis cabellos
tan dulcemente.
Es esa voz
que me habla con palabras
y deja sueños.
Es la pupila
que llega hasta mis ojos
y me da luz.
Es el latido
paciente, de tu pecho,
que anima el mío.
Es el aroma
que viene de tu cuerpo
y que me embriaga.
Es en el labio,
febril y tembloroso
que así me busca.
Y es ese talle
la cuna y el regazo
donde me duermo.
"...Te necesito..."
te grito en la distancia
y tú sonríes.
Rafael Sánchez Ortega ©
20/10/24
5.995 - HOY NACEN UNOS VERSOS...
5.994 - DÉJAME TU SONRISA...
Déjame tu sonrisa
y tus labios de plata,
pues los míos precisan
recibir tus palabras.
Ese tierno mensaje
con caricias veladas,
de tu voz y tus besos
que me llegan al alma.
Déjame que te mire
y te abrace con ganas,
y te digan mis dedos
la pasión que, ellos, guardan.
Dejarán un susurro
en tus ojos y cara,
seguirán por tu pelo
a tu cuello y garganta.
Déjame que te escriba
y tatúe tu espalda,
con los versos de otoño
que surgieron del alba.
Trazarán con la lluvia
unas letras quebradas,
en tu piel tan querida
que yo ansío besarla.
Déjame que te ame
y te siga a distancia,
porque amar, en silencio,
no es delito ni falta.
Viviré de recuerdos
y de sueños de infancia,
recreando momentos
que vivimos sin pausa.
Déjame, vida mía,
ya restaño una lágrima,
de la lluvia que, el cielo,
por mis ojos derrama.
Rafael Sánchez Ortega ©
18/10/24
5.993 - ES UN DÍA TRISTE...
5.992 - HEMOS VUELTO...
Hemos vuelto a tu lado
para ver las estrellas,
en la tarde nublada
de un octubre cualquiera.
Pero ayer era el día
de sentir esa fecha,
con los años vividos
entre risas y penas.
Suman ya unos cuantos
compartiendo vivencias,
aguantando a la vida
lo que ella nos diera.
Y cruzando las manos
visitamos aldeas,
paseamos por bosques
y escribimos poemas.
Son recuerdos preciosos
que en el alma se quedan,
con los besos y llantos
que la vida ofreciera.
Porque así lo aceptamos
y le abrimos la puerta,
a este amor, sin palabras,
que selló nuestras lenguas.
Y en silencio se amaron
estas almas gemelas,
a pesar de las nubes
y de algunas tormentas.
Y al llegar este día,
renovamos las fechas
de aquel quince de octubre
en que unimos las fuerzas.
Hoy te miro a los ojos,
mi gentil compañera,
la que amé y a quien amo,
"mariposa" y princesa...
Rafael Sánchez Ortega ©
16/10/24
5.991 - SIGO TU VUELO...
Sigo tu vuelo
y veo como marchas
hacia otras tierras.
Llevas mis letras,
con versos y suspiros
para otros ojos.
Ellos esperan
la tinta y los latidos
de esta mañana.
Vuela paloma
y lleva mis suspiros
hasta su lado.
Quiero que sientan,
con ello, mi presencia,
en un poema.
Y que mis letras
le ofrezcan la sonrisa
para sus labios.
...Cierro los ojos
y veo ese momento
en mi retina.
Sé que es un sueño.
Soñar es muy bonito
y no hace daño.
Es el otoño,
me digo en un susurro,
y está lloviendo.
Rafael Sánchez Ortega ©
15/10/24
5.990 - DESDE MI CASA...
5.989 - NO VOLVERÁN...
No volverán
los días ya pasados
de aquel verano.
Y quedarán
grabado en los recuerdos
tantos paseos.
Y tus abrazos
mi cuerpo pedirá
sin tener premio.
Y extrañaré
tus labios y tus besos
apasionados.
Y quedarán
mis sueños aparcados
con las estrellas.
Y añoraré
las noches conversando
bajo la luna.
Reprimiré
las lágrimas amargas
de mis pupilas.
Y viviré,
en medio de la vida
con tus recuerdos.
Pero no temas,
mi corazón, herido
te amará,
nunca lo dudes.
Rafael Sánchez Ortega ©
13/10/24
5.988 - BUSQUÉ EN TUS VERSOS...
Busqué, en tus versos,
las letras y el mensaje
que precisaba.
Ansiaba tanto,
la voz y tus palabras
que me faltaban.
Estaba triste,
tu ausencia me angustiaba,
profundamente.
Y conseguí
tus letras y los besos
para mi alma.
Estaban cerca,
silentes y a mi lado,
en todas partes.
En el jardín,
también en el paseo
y entre la gente.
Era la vida
llamándome a su lado
con tu recuerdo.
Porque a mi lado,
y andando de la mano,
te vi a ti.
Íbamos juntos,
hablábamos sin pausa
desde el silencio.
Y aquel poema
nacido de tus manos
cobraba vida.
Dos corazones
unían sus latidos
en una arritmia.
Rafael Sánchez Ortega ©
12/10/24
5.987 - HAY UN RELOJ...
Hay un reloj en la torre
silencioso y descuidado,
que va marcando las horas
cuando el sol brilla en lo alto.
Yo siempre le he conocido,
altanero y solitario,
con esa efigie de piedra
y en su trono bien sentado.
Fueron días de la infancia
de colegios y mecanos,
con la sombra de los juegos
y de algunos campanarios.
Y a su lado compartimos
los minutos que, en los ratos,
nos dejaban los recreos
entre clases y trabajos.
Pasó el tiempo, con nosotros,
los relojes se quedaron,
aguantando el día a día
y ese tiempo de los años.
Hoy te veo, nuevamente,
pues mis pasos regresaron,
a los muros que soportan
unos signos mal borrados.
Y te veo, generoso,
como siempre y como antaño,
señalando bien las horas
con el sol a tu costado.
Un suspiro se me escapa
de este pecho un tanto anciano,
y un susurro toma forma
con tu nombre de mis labios.
Rafael Sánchez Ortega ©
11/10/24
5.986 - EN EL DESVÁN...
En el desván,
dormidos y olvidados,
hay muchos libros.
Llenos de polvo,
ajenos a la vida,
allí descansan.
Fueron un mundo,
distinto de la infancia,
que yo viví.
Y los recuerdo,
ahora, en este otoño,
con sus colores.
¡Qué bellas letras,
cargadas de aventuras,
pude leer...!
Y aquellos ratos
de amor y de ternura
que descubrí.
Era otro mundo,
de sueños y utopías,
que vino a mi.
Hoy, el otoño,
se funde con la vida,
en mis recuerdos.
Y desearía
volviera aquella infancia
con estos libros.
Rafael Sánchez Ortega ©
10/10/24
5.985 - TRATÉ DE VERTE...
Traté de verte,
mirando al horizonte,
pero no estabas.
Tampoco el puerto
dejaba tu figura
en mis pupilas.
Te habías ido,
me dije, en el silencio,
y sin palabras.
Sentí tristeza
y un largo escalofrío,
cruzó mi cuerpo.
Me sentí solo,
en medio de la vida,
como un mendigo.
Y miré al cielo.
en busca de las nubes
y de sus lágrimas.
Lucía el sol
debajo de aquel manto,
azul celeste.
Y suspiré
sintiendo el gran vacío
con que me dejas.
Así es la vida,
con olas y resacas
que van y vienen.
Rafael Sánchez Ortega ©
09/10/24
5.984 - PIERDO LOS VERSOS...
Pierdo los versos
escritos hace un rato
y que eran tuyos.
Salí al paseo,
las sombras avanzaban
en el silencio.
Solo se oía
el coro de los mares
en las resacas.
Y vi la luna
mirando los jardines
desde los cielos.
Pensé en la playa,
las olas que llegaban
hasta la arena.
Allí dormían,
dejándonos los sueños
de sus espumas.
Y, sin pensarlo,
nacieron en mi mente,
algunos versos.
Versos y besos,
canciones y leyendas,
de luna y mar.
Así, en un dúo,
se unieron y mezclaron,
salitre y nanas.
Rafael Sánchez Ortega ©
08/10/24