A VECES MANDAMOS BESOS...
A veces mandamos besos
y cariño a las estrellas,
y hasta pedimos la luna
cuando pasa algún cometa.
Es algo que tiene un nombre
y se llama la inocencia,
porque los niños sonríen
y se divierten y juegan.
Ellos están en su mundo,
juvenil y sin novelas,
para tomar la alegría
de cada día en la tierra.
También los hombres mayores
buscan aromas y esencias,
para embriagar los sentidos
y así romper mil cadenas.
Unas que son irreales
con altibajos y huellas
que van dejando recuerdos
y telarañas eternas.
Otras que surgen del pecho,
de situaciones extremas,
donde las fuerzas se agotan
y hasta las almas flaquean.
Surgen preguntas malditas
con los silencios a cuestas,
y así se pasan los días
y así las dudas penetran.
Son como agudos puñales,
que a nuestras almas inquietas,
rozan, traspasan y alcanzan
con su aguijón y su flecha.
"...A veces versos guardamos
y en otras guardamos penas,
aunque preguntas y sueños
no tengan fieles respuestas..."
Rafael Sánchez Ortega ©
03/05/17
y cariño a las estrellas,
y hasta pedimos la luna
cuando pasa algún cometa.
Es algo que tiene un nombre
y se llama la inocencia,
porque los niños sonríen
y se divierten y juegan.
Ellos están en su mundo,
juvenil y sin novelas,
para tomar la alegría
de cada día en la tierra.
También los hombres mayores
buscan aromas y esencias,
para embriagar los sentidos
y así romper mil cadenas.
Unas que son irreales
con altibajos y huellas
que van dejando recuerdos
y telarañas eternas.
Otras que surgen del pecho,
de situaciones extremas,
donde las fuerzas se agotan
y hasta las almas flaquean.
Surgen preguntas malditas
con los silencios a cuestas,
y así se pasan los días
y así las dudas penetran.
Son como agudos puñales,
que a nuestras almas inquietas,
rozan, traspasan y alcanzan
con su aguijón y su flecha.
"...A veces versos guardamos
y en otras guardamos penas,
aunque preguntas y sueños
no tengan fieles respuestas..."
Rafael Sánchez Ortega ©
03/05/17
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario