5.517- UNA VIOLETA...



Una violeta

temblaba en la campiña

muy dulcemente.


Era la brisa,

llegando de los mares,

quien esto hacía.


Flor delicada,

sutil y misteriosa

al mismo tiempo.


Pero es bonita.

Con rasgos y ternura

para los ojos.


Lágrima fina

bajada de los cielos

a las campiñas.


Allí se prende

y pasa a los jardines

y los hogares.


Su compañía

alegra las pupilas

cada mañana.


También a ella

se acercan mariposas

a saludarla.


Llevan los besos,

silencios y palabras

que yo le entrego.


Y hasta mis sueños

se quedan en sus pétalos

y allí se duermen.


Rafael  Sánchez Ortega ©

27/06/23


No hay comentarios: