PALABRAS AZULES.
He buscado en tus labios
las palabras azules que tanto adoraba
y encontré que tus labios vacíos
hoy sueñan y tiemblan,
ausentes de besos y risas,
en medio de un mar de nostalgias.
Se cerraron los viejos colegios de antaño
y en los patios podaron las altas palmeras.
Ya no hay fuente que ofrezca el rumor de sus cantos,
ni un estanque con peces,
ni los niños jugando...
Yo recuerdo los labios tan lindos
que tanto me hablaban
y la risa acudiendo a los mismos,
y recuerdo los ojos castaños buscando los
versos del viejo cuaderno.
¡Cuánta nota robé de sus labios!,
¡Cuántos bellos poemas leímos
haciéndo un monólogo!...
Las palabras azules cerraban mis ojos,
colmaban el alma y eras tú quien llenabas
mis sueños de paz y alegría
y era yo quien zurcía las letras,
rimando los versos y haciendo bailar
a las olas.
He buscado de nuevo en tus labios
las dulces palabras azules,
esa magia y encanto vivida de niños,
aquel tibio rubor de tu frente,
la mirada coqueta buscando mis ojos
y tu mano de plata rozando la mía.
Compartimos los mismos silencios,
los mismos alientos,
los mismos asientos...
Disfrutamos oyendo pasar
en la tarde a las aves,
sintiendo a los vientos llegar del oeste.
Compartimos la lluvia del cielo
mojando los cuerpos y al final
hasta unimos los labios, los dos,
en un beso muy tierno.
Hoy reclamo esos labios tan lindos de antaño
y reclamo también las palabras azules
que tanto adoraba,
con el beso y el sueño incluídos,
así, sin nostalgia.
Rafael Sánchez Ortega ©
13/07/12
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario