MANOS...
Manos agrietadas y curtidas
que se alzan vacilantes
a la cara.
Manos tembloras por los años
y el trabajo día a día
de la tierra.
Manos que te llaman, que te gritan,
y que hablan a otras manos
simplemente.
Manos que sostienen a una cara
del esfuerzo y la fatiga
en la jornada.
Manos cariñosas que te buscan
con sus dedos encantados
y dibujan en tu cuerpo.
Manos que suplican a los cielos
esa lluvia que les llegue
y les salve las cosechas.
Manos de los pobres en las calles
y las plazas
mendigando una limosna.
Manos de un poeta con un lápiz
rebuscando entre los pliegues de su alma,
unos versos y un te quiero.
Manos de un otoño que comienza,
de un verano que termina
y una bella primavera ya lejana.
Manos que has amado, manos que has besado,
manos que suspiran y susurran,
manos que se acercan temblorosas
y te aman.
Rafael Sánchez Ortega ©
11/06/11
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario