ESTAS FECHAS...
Estas fechas, quizás singulares,
son motivo de ramos de flores,
con las rosas y lirios trenzando
unas cintas de besos enormes.
Porque vuelve el recuerdo a las almas
y de nuevo florecen colores,
en las tardes de otoño tan cortas
y en mañanas de azules y soles.
Es el tiempo de todos los santos,
cuando el hombre se vuelve hacia el hombre,
a buscar esa imagen paterna
o al hermano y amigo de entonces.
Son conscientes las almas, que buscan,
ese eterno recuerdo y redoble,
el que fija, muy bien, el espejo
a pesar de empañarlo, vapores.
Yo te invito que vengas, poeta,
a mirar y escuchar a los robles,
a sentir el latido constante
de los ríos bajando en desorden.
Porque en ellos hay verso y cadencia,
y hasta notas, que vuelan, sin norte,
para así, planear por los cielos,
y ser simples suspiros sin nombre.
"Sin palabras", amigo, me quedo,
y no sé como usar el resorte,
la herramienta que tengo en las manos
con el verso, en los dedos, que brote.
Yo quisiera que a ti te llegaran
estas fechas, sublimes de adioses,
y escucharas latir a tu pecho,
para así regresar de esa noche.
"...Una noche perdida y anclada,
con recuerdos de risas y voces,
donde tú sonreías, amando,
a los seres queridos y nobles..."
Rafael Sánchez Ortega ©
31/10/15
son motivo de ramos de flores,
con las rosas y lirios trenzando
unas cintas de besos enormes.
Porque vuelve el recuerdo a las almas
y de nuevo florecen colores,
en las tardes de otoño tan cortas
y en mañanas de azules y soles.
Es el tiempo de todos los santos,
cuando el hombre se vuelve hacia el hombre,
a buscar esa imagen paterna
o al hermano y amigo de entonces.
Son conscientes las almas, que buscan,
ese eterno recuerdo y redoble,
el que fija, muy bien, el espejo
a pesar de empañarlo, vapores.
Yo te invito que vengas, poeta,
a mirar y escuchar a los robles,
a sentir el latido constante
de los ríos bajando en desorden.
Porque en ellos hay verso y cadencia,
y hasta notas, que vuelan, sin norte,
para así, planear por los cielos,
y ser simples suspiros sin nombre.
"Sin palabras", amigo, me quedo,
y no sé como usar el resorte,
la herramienta que tengo en las manos
con el verso, en los dedos, que brote.
Yo quisiera que a ti te llegaran
estas fechas, sublimes de adioses,
y escucharas latir a tu pecho,
para así regresar de esa noche.
"...Una noche perdida y anclada,
con recuerdos de risas y voces,
donde tú sonreías, amando,
a los seres queridos y nobles..."
Rafael Sánchez Ortega ©
31/10/15
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