TENGO EL CORAZÓN CANSADO...
Tengo el corazón cansado
y plagado de remiendos,
con mis pasos que vacilan
y se arrastran por el suelo.
Voy desnudo y cabizbajo
y hasta un tanto soñoliento,
embriagado de la vida
que he bebido con exceso.
Soy un triste vagabundo,
un poeta con sus versos,
y un juglar, que en sus canciones,
saca todo de muy dentro.
Pero es algo que sabía
y el dolor no es algo nuevo,
pues se sufre cuando se ama
si el amor es verdadero.
Tengo el corazón cansado
y atrapado en un lamento,
reteniendo tu figura
que se escapa de mis dedos.
Voy detrás de una quimera,
vagabundo como el viento,
persiguiendo fantasías
a lo largo de los cielos.
Soy payaso en las aceras,
Don Quijote en los alberos,
y hasta soy si tú me apuras
el cometa de tus sueños.
Pero sigo caminando,
tras tus pasos, en el tiempo,
y te siguen sin palabras
mis abrazos y mis besos.
Tengo el corazón cansado
de vivir y estar sufriendo,
mendigando bien la sombra
y una fuente en el desierto,
Voy cogiendo los cristales
que se han roto del espejo,
y se clavan en las manos
y no sé donde meterlos.
Soy un simple fedatario
que confirmo lo que veo,
y lo hago con la pluma
que da vida a los cuadernos.
Pero hay algo que transforma
la resaca en un crescendo,
y me quedo ensimismado
escuchando tal concierto.
"...Tengo el corazón cansado
y se apaga el sentimiento,
aunque espero que tú llegues,
y compartas mi silencio..."
Rafael Sánchez Ortega ©
02/09/13
y plagado de remiendos,
con mis pasos que vacilan
y se arrastran por el suelo.
Voy desnudo y cabizbajo
y hasta un tanto soñoliento,
embriagado de la vida
que he bebido con exceso.
Soy un triste vagabundo,
un poeta con sus versos,
y un juglar, que en sus canciones,
saca todo de muy dentro.
Pero es algo que sabía
y el dolor no es algo nuevo,
pues se sufre cuando se ama
si el amor es verdadero.
Tengo el corazón cansado
y atrapado en un lamento,
reteniendo tu figura
que se escapa de mis dedos.
Voy detrás de una quimera,
vagabundo como el viento,
persiguiendo fantasías
a lo largo de los cielos.
Soy payaso en las aceras,
Don Quijote en los alberos,
y hasta soy si tú me apuras
el cometa de tus sueños.
Pero sigo caminando,
tras tus pasos, en el tiempo,
y te siguen sin palabras
mis abrazos y mis besos.
Tengo el corazón cansado
de vivir y estar sufriendo,
mendigando bien la sombra
y una fuente en el desierto,
Voy cogiendo los cristales
que se han roto del espejo,
y se clavan en las manos
y no sé donde meterlos.
Soy un simple fedatario
que confirmo lo que veo,
y lo hago con la pluma
que da vida a los cuadernos.
Pero hay algo que transforma
la resaca en un crescendo,
y me quedo ensimismado
escuchando tal concierto.
"...Tengo el corazón cansado
y se apaga el sentimiento,
aunque espero que tú llegues,
y compartas mi silencio..."
Rafael Sánchez Ortega ©
02/09/13
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario