ENCERRADO EN EL MUNDO DE LOS SUEÑOS...
Encerrado en el mundo de los sueños
permanecen, gozosos, los poetas,
para aquellos su cárcel es preciosa
rodeada de versos y de estrellas.
Es, por eso, que siguen en su mundo,
en la bella locura de sus letras,
y responden con ecos y suspiros
a las frases, lejanas, que les llegan.
En su alma, que acosan nigromantes,
no hay cabida de cuerdos y quimeras
y si acaso se quejan los cipreses
es por falta de luces y linternas.
Pero sabe el poeta, que en el cielo,
hay arpegios y notas que le esperan,
y también en los ojos de los niños
y en los hombres que vagan por la tierra.
Es consciente del miedo y la locura
y también del amor y las fronteras,
y por eso recibe los mensajes
que la sangre transmite en nuestras venas.
Soñador de misiones imposibles,
corazón que rebosa sutileza,
así es el poeta que imagino
y dibuja su mano en un poema.
Porque hay soñadores que reciben
el mensaje que emite la prudencia,
y es la vida, tal vez, con sus pupilas,
la dadora y la sangre que se entrega.
Es la esencia que llega hasta el cuaderno
y el poeta recoge con su néctar.
para luego entregar a los lectores
ese caldo y cultivo que embelesa.
"...Encerrado en el mundo de los sueños,
él no es prisionero de cualquiera,
y lo saben sus ojos soñadores
y también, el poeta en su inocencia..."
18/11/16
permanecen, gozosos, los poetas,
para aquellos su cárcel es preciosa
rodeada de versos y de estrellas.
Es, por eso, que siguen en su mundo,
en la bella locura de sus letras,
y responden con ecos y suspiros
a las frases, lejanas, que les llegan.
En su alma, que acosan nigromantes,
no hay cabida de cuerdos y quimeras
y si acaso se quejan los cipreses
es por falta de luces y linternas.
Pero sabe el poeta, que en el cielo,
hay arpegios y notas que le esperan,
y también en los ojos de los niños
y en los hombres que vagan por la tierra.
Es consciente del miedo y la locura
y también del amor y las fronteras,
y por eso recibe los mensajes
que la sangre transmite en nuestras venas.
Soñador de misiones imposibles,
corazón que rebosa sutileza,
así es el poeta que imagino
y dibuja su mano en un poema.
Porque hay soñadores que reciben
el mensaje que emite la prudencia,
y es la vida, tal vez, con sus pupilas,
la dadora y la sangre que se entrega.
Es la esencia que llega hasta el cuaderno
y el poeta recoge con su néctar.
para luego entregar a los lectores
ese caldo y cultivo que embelesa.
"...Encerrado en el mundo de los sueños,
él no es prisionero de cualquiera,
y lo saben sus ojos soñadores
y también, el poeta en su inocencia..."
18/11/16
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario