5.825 - HE VISTO GOLONDRINAS...
He visto golondrinas
pasar tras mi ventana,
y vienen de muy lejos
en plena temporada.
Al verlas me he alegrado
con risa dulce y franca,
sonrisa del anciano
que busca así, la infancia.
Preciosas primaveras
cubiertas con la magia,
que acercan los recuerdos
al roce de sus alas.
Aquellas golondrinas,
trazando filigranas,
venían a nosotros,
al nido y a su casa.
Suspiro al recordarlo
y sé que el tiempo manda,
hoy solo son retales
de un tiempo con las hadas.
¡Qué bello es este instante
que asoma a las pestañas
y alegra las pupilas
del hombre y de su alma!
Rafael Sánchez Ortega ©
30/04/24
5.824 - LA TARDE YA SE MARCHA...
5.823 - OBSERVO AL MUNDO...
Observo al mundo,
enfermo, y que agoniza
desde hace años.
Estoy en él
y siento sus dolores
y calenturas.
Y se desgarran
sus tierras y mi carne
en la agonía.
Es un infierno
llevar esta condena
sobre los hombros.
No sé si somos
culpables o inocentes
de esta tragedia.
Algo está mal,
ignoro el argumento
y no lo alcanzo.
Pero sí, siento,
que falta la empatía
entre las gentes.
Y que nos vemos
y odiamos, sin motivo,
en nuestros pueblos.
¡Cuánta desgracia
nos cubre con su manto
por ser tan tontos!
"...Y yo no quiero
morir, sin tu sonrisa,
mi poesía..."
Rafael Sánchez Ortega ©
28/04/24
5.822 - RESUENAN LOS TAMBORES...
Resuenan los tambores
y empieza la batalla,
se agitan las banderas
y se alzan las espadas.
La tierra se resiste
a tropas y metrallas,
no quiere lodo y barro
ni ser hoy calcinada.
La sangre de los hombres
bombea sus entrañas,
y aquellos corazones
se alejan de la magia.
La vida es un infierno
que no conduce a nada,
la luz del sol es ciega
y hay nubes que la apagan.
Se rezan oraciones
en forma de plegarias,
susurros de unos labios
que solo piden agua.
El agua de la vida
de ríos y montañas,
de fuentes y de ofrendas
con paz para las almas.
Resuenan los tambores
y hay miedo en las miradas,
la muerte ya se acerca
dejando la desgracia.
Rafael Sánchez Ortega ©
27/04/24
5.821 - CANTAN LAS AVES...
Cantan las aves,
llegó la primavera
con sus colores.
La libertad
estalla por las calles
y los jardines.
Suenan las voces
de gentes y personas
en la ciudad.
Y las sonrisas
asoman a los labios
muy temblorosas.
Días de sol,
azules en los cielos,
y renovados.
¡Qué gran ternura
se nota en las miradas
de tantos niños!
Pero en la mía
se asoma la tristeza
por otros ojos.
Ojos con llantos,
y lágrimas crueles
en otros niños.
Junto a la paz
yo noto ese vacío
e indiferencia.
Así es la vida,
balanzas y equilibrios
un tanto injustos.
Rafael Sánchez Ortega ©
26/04/24
5.820 - EL VIAJE EN AQUEL TREN...
El viaje en aquel tren
sin duda, lo recuerdo,
marchaba a la ciudad
a ver algunos médicos.
Tenía algún problema
causado por los nervios,
de infancia, y privaciones,
febril y bien diversos.
No olvido la estación,
vagones y humo negro,
producto del carbón,
y el grito de los frenos.
Salimos de la aldea,
quizás, más bien del pueblo,
dejando atrás el mar,
y el muelle junto al puerto.
Subimos a un vagón
con dulce traqueteo,
y fuimos por las vías
a ver a los galenos.
No importa la consulta,
si acaso el movimiento,
de gentes y de calles
rompiendo aquel silencio.
El viaje en aquel tren
rompió mis sentimientos,
y entonces vi, en mi vida,
la paz que dan los sueños.
"Se sueña sin viajar
y el mundo es más sincero,
aunque, también, hay viajes
que solo son un sueño."
Rafael Sánchez Ortega ©
25/04/24
5.819 - LOS REMOS...
Los remos, con su impulso,
ya avanzan la trainera,
en medio de las aguas
que sube la marea.
Dos manos en los remos
conforman la faena,
del hombre y el marino
que busca así la pesca.
Saldrá para las playas
llamadas de Bederna,
y en ellas hará un alto
con brisa mañanera.
Luego, sus aparejos,
intentarán la presa,
la pesca tan preciada
que supla la miseria.
El pan y la comida
fiada en unas tiendas,
pedida por dos niños
que pierden hoy la escuela.
Recuerdo esos instantes,
los tengo en mi cabeza,
puñales en el alma
con años de tristeza.
Por suerte ya han pasado
quedando aquí las huellas,
del remo y la ciaboga
y el hombre por su pesca.
Rafael Sánchez Ortega ©
24/04/24