SE ESCURRE LA ESPERANZA ENTRE MIS SIENES...
Se escurre la esperanza entre mis sienes
y empiezan los momentos de locura,
es una marejada que el destino
requiere que lo acepte y que lo asuma.
Mas niego la evidencia del presente
y busco los recuerdos de la cuna,
aquellos recalados en mi sangre
a fuerza de cariño y de ternura.
Se marcha la esperanza y me resisto
a ser el compañero de las dudas,
el niño con la cara de payaso
llorando bajo el manto de la luna.
El pobre mendigando la migaja
y en ella las respuestas a la culpa,
de ser tan sólo el hombre y el poeta
con alma juvenil y sin fortuna.
Se tiñe la esperanza de oropeles
y salen los cipreses con la bruma,
un ángel aparece descolgado
del cielo irreverente con dulzura.
Confieso que me siento avergonzado
al ver la desnudez inoportuna,
me faltan los vestidos de unos versos
que vengan de los labios de una musa.
La dueña que acelere mis latidos
y baile junto al mar, también desnuda,
la fiebre y la pasión, que por mis venas,
me lleve hasta el placer de la tortura.
¡Qué bello es disfrutar con estos sueños!,
¡qué hermosa maravilla tan profunda!
soñar es disfrutar de la esperanza
que marcha y se diluye en la penumbra.
Rafael Sánchez Ortega ©
03/08/12
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